1) Guíate y entiende la forma del rostro: ¿Una cara redonda? La coleta ha de definirse según el tipo de rostro. Un golpe lateral o un flequillo puede ayudar a desviar la atención de una frente grande, por ejemplo. Evitar el peso en una forma de cara redondeada ayudará a equilibrar los rasgos.
2) Define el diseño: por supuesto, obligado, un espray o producto de protección para preparar y proteger el cabello del calor. Para una superficie elegante, lo mejor es escoger una plancha de alisado profesional, por supuesto, la mejor. Y si quieres más volumen, también. No todas las planchas consiguen los mismos acabados.
3) Divide en secciones: divide la cola de caballo en secciones (de dos a tres). Estas serán muy importantes en función del acabado, sobre todo en cuestión de ondas más o menos marcadas. Establecer la posición de la cola de caballo, recoger el cabello y utilizar un cordón para asegurar.
4) Longitud: las extensiones son siempre una opción para estilos más largos: elije aquellas que coincidan con la textura original del cabello y la longitud deseada. Utiliza horquillas para asegurar extensiones en la parte superior e inferior de la cola de caballo.